Carta al alcalde de Turenne
Mehdi Belhaj Kacem
diciembre 2021
ville. Turenne (Francia)
A continuación publicamos la carta pública del filósofo y escritor Mehdi Belhaj Kacem al alcalde de su ciudad, denunciando las consecuencias humanas y sociales de las medidas sanitarias desde el comienzo de la crisis sanitaria y de la obligación vacunal.
Estimado Sr. Alcalde de Turenne, Yves Gary:
Un amigo me envió anoche su carta (véase más abajo) titulada "Unas palabras del alcalde". Y casi me da un ataque de risa. Evidentemente no soy el único, porque a la mañana siguiente me di cuenta de que su carta circulaba mucho por las redes. Por lo tanto, es mi deber informarle de que ya es el hazmerreír de cientos de miles de franceses. En primer lugar, me gustaría presentarme ante usted. Hace casi veinticinco años que vivo en Turenne, en una casa que es una herencia familiar. Soy escritor y filósofo de profesión, y he publicado más de treinta libros, muchos de ellos en grandes editoriales (Gallimard, Grasset, Fayard, Stock...). Mi tercera novela, 'Vidas y muertes de Irène Lepic', escrita a los veintiún años, es considerada hoy por miles de personas como una de las mejores novelas de los años noventa. Michel Houellebecq, ante una audiencia de personalidades del arte contemporáneo, dijo que yo era el único escritor de su generación tan bueno como él. Fui el primer filósofo que tuvo derecho a un coloquio a la edad de 39 años en la Escuela Normal Superior de la calle d’Ulm, de la que han salido el 90% de los grandes filósofos de Francia en los dos últimos siglos, aunque soy completamente autodidacta (título de bachillerato). Alain Badiou me presentó públicamente hace quince años como uno de los dos filósofos más dotados de mi generación, y el antropólogo de fama internacional David Graeber, fallecido prematuramente el año pasado en Venecia, solía decir a su alrededor que yo era el mayor filósofo vivo, y mucha gente piensa como él. Un gran poeta estadounidense, Steve Light, escribió que nunca antes en la historia de la filosofía había habido tal proporción entre la invención conceptual sistemática y el autodidactismo.
Podría seguir así durante páginas y páginas.
Como dice un gran médico y denunciante de esta situación, el Dr. Roger Hodkinson, del que debería usted también aprender de él: « I am proud of my fuckin C.V. » ("Estoy orgulloso de mi puto currículum »).
Así que me disculpo por darme tanta importancia a mí mismo, reconozco que esto no es muy elegante. Pero cuando hablo con gente como usted, me siento obligado a hacerlo, para que mi interlocutor entienda que no está tratando precisamente con lo que la gente corriente llama "un don Nadie". Usted habla de su "competencia" en su carta, sin decirnos nada más (un suave eufemismo); por lo tanto, me veo obligado, como preámbulo a las discusiones con personas como usted, a exponer mis títulos de nobleza al respecto, es decir, las capacidades de análisis y reflexión que todas las personas competentes, en su momento, reconocen en lo que a mí concierne.
Uno se pregunta en primer lugar, al leer su carta, cuál es su título de "competencia". Si se basa en la apertura de los principales diarios, en escuchar nuestras radios nacionales, o en ver BFMTV o France 2, efectivamente tiene un problema. En 2021, no es así como se obtiene la información, sino yendo a las fuentes; creer que se aprende algo consumiendo los medios de comunicación de masas es como ser un neandertal en cuanto a información cuando aparecen los cromañones, o luchar con un garrote cuando se acaban de inventar las armas de fuego.
Esta es la explicación más plausible: desde hace más de un año y medio, la mayoría de nuestros conciudadanos están aislados de todas sus capacidades cognitivas por la incesante propaganda difundida por los medios de comunicación, subvencionados por el Estado y propiedad de las ocho familias más ricas de Francia. Hace tiempo que la función de estos medios de comunicación ha dejado de ser la de informar a la gente, para ser simplemente portavoces del gobierno. Por lo tanto, todas las consideraciones que le hace a su público se basan en la credibilidad que usted le da a lo que dicen. Esto supone, en definitiva, que han dicho la verdad durante año y medio. Pero lo cierto es lo contrario.
Este gobierno ha mentido en absolutamente todo. Este gobierno no es más que una herramienta al servicio de instituciones supranacionales como la OMS, o de multinacionales como Pfizer. ¿Sabía usted que nuestro Presidente de la República había negociado, cuando trabajaba para el banco Rothschild, un contrato por valor de 10.000.000.000 de dólares entre Nestlé y... Pfizer (¿ha dicho usted "cuentas offshore"?)?
¿Sabía que su mujer tenía muchas acciones en la misma empresa?
¿Sabía que fue Pfizer quien alimentó la cuenta suiza de Cahuzac, y probablemente de muchos miembros del Partido Socialista, el que quiere empujarnos a la vacunación obligatoria?
¿Sabía usted que Pfizer es la empresa farmacéutica más corrupta y condenada de todos los tiempos (más de cuarenta veredictos negativos, más de 5.000.000.000 de dólares en daños pagados en total)?
Comienza su carta diciendo que esperábamos que, en primavera, el covid-19, si me permite la expresión, nos dejaría un poco en paz. ¡Ay!, y ahora dice usted: que estamos en la cuarta ola. Siento desengañarle: no hubo cuarta ola, porque no hubo tercera ola, no hubo segunda ola, no hubo primera ola, y de hecho nunca hubo una "pandemia" en absoluto, excepto en unas pocas mentes calenturientas, en particular las que dirigen la OMS, probablemente la organización política más criminal de todos los tiempos.
No ha habido ninguna "pandemia", y las cifras oficiales lo demuestran. Escriba en Google "muertos covid" y encontrará la cifra, en el día que escribo, de 4.800.000 de la población mundial, es decir, alrededor del 0,04%, lo que es irrisorio. Es aún más irrisorio cuando se conoce la edad media de las víctimas: 84 años. Es decir, personas que superan ampliamente su esperanza de vida. Digo "en gran medida", porque en nuestros países occidentales (Francia, Italia...), la esperanza de vida es de 82 años, y por eso hemos pagado más "caro" (0,14/0,15%) que muchos países más pobres, donde la esperanza de vida es, por supuesto, mucho menor. Esto es sólo para que se dé cuenta de que, desde hace año y medio, mucha gente, empezando por los medios de comunicación centralizados, y usted a su vez, han estado "razonando" sobre una quimera semántica pura y dura: "hay un virus
devastador que está afectando a todo el planeta, matando al 0,04% de su población, en su mayoría personas que están muy por encima de su esperanza de vida." Esta frase carece literalmente de sentido y, sin embargo, es la base de toda la "retórica" de la que hace gala en su carta, con la que se nos ha acosado durante más de un año y medio. Cualquier estudiante de filosofía de primer año sabe que si la premisa es falsa, el resto del discurso también lo es. En realidad la cosa va mucho más allá, en lo que es la mayor y más grave manipulación política de masas que se ha perpetrado en nuestra historia. Aquí también lo dicen los documentos oficiales. Le remito a este enlace:
https://bit.ly/3GETZ5t
Como verá es el informe detallado de la Sanidad Pública francesa sobre la crisis del covid entre marzo de 2020 y marzo de 2021. Le aconsejo que lea las 68 páginas completas, pero si no tiene suficiente tiempo, puede saltar a la página 43. Allí descubrirá esta asombrosa cifra: de las aproximadamente cien mil supuestas muertes por covid, sólo 14471 murieron realmente por covid. Los demás, en realidad, murieron de otra cosa: cáncer, leucemia, diabetes, insuficiencia cardíaca, etc. Así que: el 0,04% de muertes por el terrible virus está, en realidad, más cerca del 0,004%: es decir algo completamente ridículo. Porque las cifras oficiales de otros países dicen exactamente lo mismo: por ejemplo, los CDC de Estados Unidos, que establecieron de forma similar que, de todas las muertes declaradas oficialmente por covid, sólo el 6% de ellas eran « sin comorbidad", es decir, el 94% de ellas murieron de algo totalmente distinto.
Así que, en términos de "competencia" y rigor argumental, es muy erróneo por su parte comparar la situación actual con la difteria, la tuberculosis, el sarampión o la poliomielitis: estas enfermedades eran, de hecho, masivamente letales; el covid 19, en realidad, no mata a casi nadie, sino que ataca a personas que ya habían superado su esperanza de vida. A continuación, afirma usted, sobre esta base inconsistente, que sólo la vacunación masiva conducirá a la "inmunidad de rebaño" (una noción que es científicamente irrelevante, como sabe cualquier persona con conocimientos reales). Desgraciadamente para usted, todos los países que han vacunado masivamente, como Israel o Gibraltar, han visto como sus tasas de mortalidad se disparan, así como sus tasas de infección por covid (¿la única solución? Una tercera dosis, después de que las dos primeras hayan sido un auténtico fracaso. Y vendrán una cuarta, una quinta, una sexta…).
Así que se equivoca cuando dice que sólo la vacunación masiva nos permitirá salir de la pandemia: en primer lugar, nunca ha habido una pandemia, sino una pandemia de mentiras, terror, atontamiento y manipulación; en segundo lugar, las "vacunas", que ni siquiera merecen este nombre, no sólo son ineficaces, sino peligrosas. Lo demostraré a continuación, con cifras oficiales, en contra de su negacionismo bravucón al respecto. Usted pide, lo que demuestra que son se ha contagiado por el covid: "¿Cómo podemos seguir hablando seriamente de una vacuna experimental cuando se ha inyectado a casi la mitad de la población mundial sin apenas efectos secundarios? » ¿Cómo? Pues es muy sencillo: leyendo lo que escribe la gente de Astrazeneca, Pfizer, Moderna y Johnson en sus respectivas páginas web: que las vacunas están en fase 3 (ratas de laboratorio normalmente), y que estos experimentos terminarán en 2022 o 2023, según la marca. La gente de Moderna llega a escribir: "nuestra vacuna es un sistema operativo somático, cuyo propósito es hackear sus funciones biológicas »(sic). El hecho de que la mitad de la población mundial haya sido inyectada, en su mayoría bajo chantaje y coacción apenas evitada, le impide darse cuenta de la terrible evidencia: efectivamente, estamos asistiendo al experimento médico más gigantesco jamás intentado con la humanidad. Tarde o temprano, el verdadero propósito de esta experimentación será obvio para sus ojos tan iluminados. Como dijo Coluche: « No porque sean muchos los que se equivocan van a tener razón".
Pero la frase de su carta que más me hizo reír fue la que dice: "con pocos o ningún efecto secundario". ¿Ah, sí? También en este caso hay que fiarse de las cifras oficiales, y nada más. Eudravigilance, el sitio web europeo de farmacovigilancia, presentó las siguientes cifras a principios de octubre: 27.222 muertes, casi 2.300.000 efectos secundarios, la mitad de ellos graves (y seamos claros: "grave", en farmacovigilancia, significa: "discapacidad de por vida"). El adverbio de su frase adquiere todo su significado a la luz de estas cifras debidamente fundamentadas... ¿ha dicho usted que tenía « competencia"? Pero eso no es todo. Todos los especialistas en investigaciones de farmacovigilancia le dirán que sólo se notifican realmente entre el 1 y el 10% de los efectos secundarios; de modo que hay que multiplicar las cifras obtenidas oficialmente por al menos diez para acercarse, y sólo acercarse, a la verdad.
Por lo tanto, tenemos las más firmes razones racionales para creer que, en los países de la UE (excluyendo a Inglaterra, donde las cifras oficiales también son aterradoras), se han producido al menos 270.000 muertes, y 21.000.000 millones de personas discapacitadas de por vida. Es decir, sólo en Europa, muchas más víctimas de las vacunas que del desafortunado covid 19 en todo el mundo.
Le remito a este enlace, un breve vídeo que hice con un amigo, frente a esta organización criminal, la Orden de Medicina (nota del tr. equivalente al Colegio Oficial de Médicos español) , que persigue a los médicos que se atreven a tratar a sus pacientes y a contar la verdad de lo que nos está pasando desde hace año y medio.
https://odysee.com/@belhajkacem.mehdi:8/t_file6034928538396658340:1
Pero, por cierto, ¿cuáles son esos efectos secundarios? Como dice el valiente Dr. Ochs, el riesgo de la vacuna es 40 veces mayor para los menores de cincuenta años que el propio covid. ¿Qué pasa con nuestros adolescentes, que han sido vacunados en masa desde el inicio del curso escolar, contra una enfermedad por la que está demostrado que no tienen para ellos consecuencias graves? ¿Qué pasa con nuestros hijos, que están a punto de ser vacunados contra lo mismo (el mismo Dr. Ochs saca la conclusión obvia: "infanticidio")? ¿Está seguro de su adverbio? ¿No hay una pequeña pulga que empieza a picar en su oreja?
Aquí le describo los efectos secundarios: Accidentes cerebrovasculares; miocarditis (especialmente en jóvenes y adolescentes, que es aberrante); pericarditis; trombosis; trastornos neurológicos graves; trastornos gastroentéricos graves; trastornos neurológicos graves; parálisis de Bell; síndrome de Guillain-Barré; convulsiones violentas; abortos (uno de cada ocho... ); epilepsia; necrosis; zonificación; ceguera; sordera; y la lista sigue y sigue... Puedo enviarle listas kilométricas de deportistas de alto nivel que han muerto por complicaciones cardíacas, o cuyas carreras han terminado a causa de la vacunación. No sé cómo no es capaz de entender este "extraño" fenómeno del que se hace eco toda la prensa regional: el inusual número de adolescentes que sufren infartos mientras practican deporte en el instituto.
Pero incluso si me alejo de los edificantes datos oficiales, y simplemente miro a mi alrededor, donde el entusiasmo por la "vacuna" no es la norma, he visto : un hombre de 42 años, padre de tres hijos, que murió de un paro cardíaco después de la inyección; un militar de 25 años, deportista que no fumaba ni bebía, que sufrió un derrame cerebral después de la inyección, y cuya carrera está acabada; una mujer de unos sesenta años, que desarrolla desde la inyección un asma brutal y persistente; un amigo que sufrió una diarrea viral muy dolorosa después de la inyección. Pero el efecto secundario más claro y extendido, que ha dado lugar a innumerables testimonios en las redes, es la grave alteración de los ciclos menstruales en mujeres jóvenes y adolescentes. Hablé con una mujer de 25 años (no vacunada), que me confirmó que todas sus amigas vacunadas tenían graves problemas menstruales. Y también hablé con una adolescente (no vacunada), que también me dijo que todas sus amigas vacunadas tenían grandes problemas con la menstrución. En los países en los que se ha vacunado a los niños, como Estados Unidos, hay informes de hemorragias vaginales en niñas pequeñas, o incluso en bebés de sexo femenino. (A la inversa, hay muchos informes de mujeres que han estado menopáusicas durante años... y que han vuelto a menstruar). No hace falta ser la futurólogo para saber cuáles serán las consecuencias, en términos de fertilidad, para toda una generación. Seguro que usted tiene hijos y/o hijas, incluso nietos. Espero que su entusiasmo por las vacunas se detenga a tiempo para salvar su linaje. Además, y ya que tiene una fe tan ciega en las"vacunas", y por tanto es más que probable que se inyecte, por qué no hace las siguientes pruebas: Prueba de dímero D (que medirá los niveles de microcoágulos que tiene en la sangre); prueba de serología (para ver en qué punto se encuentra su sistema inmunológico); y una prueba de electromagnetismo (sí, sí, esto no es una tesis "conspiranoica", muchos estudios científicos han demostrado que los vacunados están"magnetizados"). Repito: ya que tiene tanta confianza en estas "vacunas", ¿por qué no hacerse estas tres pruebas? Pero prefiero ser sincero con usted: es casi imposible que no se lleve una mala sorpresa al menos haciendo las tres… Además, a los que no tienen miedo de vender las enormidades de los medios de comunicación y de un gobierno criminal, mentiroso y corrupto, quiero advertirles que no pienso guardar silencio.
El Dr. Michael Yeadon, nada menos que el ex subdirector de Pfizer, y un científico de primera línea (biología), lleva un año y medio hablando de la "Tercera Guerra Mundial"; yo acuñé la frase "Primera Guerra Civil Mundial" en una entrevista con el Times of Israel hace ocho meses, que desde entonces ha sido recogida por cientos de miles de personas; y desde hace unos meses uso la frase "genocidio no convencional", igual que hablamos de "guerra no convencional". Es decir, ya no son necesarias las ametralladoras, las cámaras de gas o los machetes; basta con imponer el confinamiento, las máscaras y las "vacunas".
El confinamiento ya ha destruido la vida de miles de millones de personas en todo el mundo (incluida una muy cercana a mí, que se suicidó a raíz del primer confinamiento que se decretó), a pesar de que esta medida se ha demostrado que tampoco tuvo beneficios probados para la salud. Las mascarillas son ineficaces y tóxicas cuando se llevan demasiado tiempo, ya han traumatizado a toda una generación de niños y adolescentes; por último, las vacunas ya se han cobrado muchísimas más víctimas en todo el mundo que el miserable, y en realidad casi inofensivo, virus que se supone que combaten.
Genocidio, sí, y quizá el mayor de todos los tiempos, en la medida en que, si resulta que la "vacuna" tiene la función de modificar el genoma humano, no sólo sería el mayor en cantidad, sino también en calidad: sería el genocidio más literal que jamás haya existido. ¿Exageración? ¿Por qué muchos supervivientes del Holocausto (Velma Sharav, el rabino Hillel Handler, Hagar Schafrir, Sorin Shapira, Mascha Orel, Morry Krispijn, Shimon Yanowitz, Hila Moscovich, Tamir Turgal, Amira Segal, Jacqueline Ingehoes, Andrea Dresher, Edgar Siemund, etc.) dicen lo mismo que yo y que millones de franceses, al igual que cientos de millones de personas en todo el mundo?
¿Cómo se puede, sin morirse de vergüenza, felicitarse por lo que está haciendo la sanidad pública francesa, cuando está siendo, muy conscientemente, desmantelada y destruida poco a poco (aunque en realidad esto empezó hace décadas). ¿Se puede saber por qué usted no dice nada de los 350.000 sanitarios que han perdido su empleo desde el 15 de septiembre sin derecho a paro, que han sido literalmente echados a la calle como por único pretexto rechazar la vacunación?
Así pues, permítame moralizar al moralizador que usted es: lo que es « pernicioso e irresponsable » no son ciertamente los alarmados ciudadanos como yo, que denuncian, como el gran abogado alemán Reiner Fuellmich, que estamos ante el "mayor crimen contra la humanidad jamás cometido", sino que el problema son las personas irreflexivas y desinformadas como usted.
Mostrar humildad, admitir que se equivocó (porque se equivocó), pedir disculpas, abrir los ojos: son sólo algunas de las cosas que podría hacer para no quedar, a los ojos de la historia, como los políticos de 1939-45 en Francia bajo la ocupación alemana y el gobierno de Vichy: Lo que está ocurriendo ahora es en todo sentido homologable a lo que ocurrió entonces, salvo que hoy es a una escala mucho mayor (que es lo que dicen todos los supervivientes de la Shoah que he mencionado anteriormente).
De nosotros dos, soy yo el único responsable, que está arriesgando su reputación y tal vez mi vida para despertar al mayor número posible de personas ante esta realidad de lo que está ocurriendo a escala mundial, y de lo que esta carta sólo ofrece un pequeño trozo del iceberg. Deben saber que estoy tan horrorizado por la situación que se vive en el mundo desde hace dos años y que paso literalmente doce horas al día informandome y documentando sobre la situación. Así que si quiere despertar de su "sueño dogmático", como decía Kant, estoy a su entera disposición: vivo a sólo cien metros del ayuntamiento.
Mehdi Belhaj Kacem